Despliegue de itinerarios para bicicletas / VMP en Segovia

Años: 2020-2022
Cliente: Ayuntamiento de Segovia.

Este proyecto resuelve el reto de crear una red de itinerarios ciclistas con un presupuesto muy ajustado en una ciudad que parte de un situación de reducida movilidad ciclista urbana. Para abarcar el máximo territorio posible se ha considerado una actuación en cuatro niveles según la dificultad de la vía:

1. Itinerarios recomendados: Se señalizan 27,6 km de calles con tráfico escaso y calmado que ya pueden usarse para moverse sin dificultad. Se indican destinos relevantes (barrios, estaciones, centros de estudios), la existencia de aparcamiento para bicicleta y tiempo estimado.
En algunos casos se ofrece más de una alternativa en función del tipo de usuario.

2. Ciclocarril: En 6,2 km de calles donde pueda existir cierta presión por parte de los vehículos se indica con señales horizontales y verticales el derecho de las bicis y VMP a usar la calzada ocupando todo el carril.

3. Ciclocarril reforzado: En 6,5 km donde se ha detectado un exceso de velocidad, la señalización de ciclocarril se refuerza con medidas de pacificación del tráfico, como estrechamientos de carril o badenes discontinuos que permiten el paso de las ruedas de la bicicleta y el VMP, así como señales que ayudan a una conducción más respetuosa por parte de los vehículos a motor.

Esta medida mejora la seguridad peatonal de 21 cruces, a los que se le suman otros 7 gracias al despeje visual que implica sustituir la plaza de aparcamiento anterior al cruce por un aparcabicis.

4. Carril-bici/VMP: En 1,8 km donde el tráfico es intenso, o la seguridad puede verse comprometida por escasa visibilidad o pendiente desfavorable se opta por construir un carril adicional (generalmente de subida) exclusivo para bicicletas y VMP, aunque éstos podrán usar otros carriles para girar a la izquierda o entrar a las rotondas.

Para garantizar la seguridad de estos carriles, se han diseñado con un mínimo de 2 m. de ancho, siempre unidireccionales, siguiendo la lógica del tráfico y creando zonas de negociación amplias en las intersecciones evitando así los ángulos ciegos.

El proyecto también incorpora por primera vez en Segovia dobles sentidos reservados a bicicletas y VMP (carriles a contramano) en calles que hasta ahora eran de sentido único, facilitando así trayectos más directos y con menor pendiente.

Al emplear calles fáciles se ha podido crear una red continua que cubre buena parte de la ciudad sin necesidad de construir carriles-bici más que en los tramos más difíciles y sin tocar el espacio del peatón, que sale beneficiado con la mejora de seguridad de la actuación.